domingo, 24 de octubre de 2010

Este no es mi Hércules

Un partido extraño tanto en la alineación como en el desarrollo del mismo. De entrada no está Tote ni tan siquiera en la convocatoria ¿? No lo entiendo, ¿está lesionado? ¿Tiene algún problema con Esteban? Yo creo más esto último. A mí me parece que no le ha gustado estar en el banquillo este año que acaban de subir a primera y “el boquerón” ha impuesto la ley del que manda, en plan Mourinho. Drenthe tiene una gastroenteritis que le dura más tiempo de lo normal, a mí que me parece que al míster no le ha gustado que se hablara de él por sus devaneos “rosas”. Y la falta que no entiendo es la de Fritzler, la hemos sufrido a lo largo de los 90 minutos. Que cada uno piense lo que quiera, pero esta revolución no me ha convencido y el resultado así lo demuestra.

Porque al principio iba bastante mal y podía haber sido peor. No veíamos el cuero ni por casualidad, Tiago y Aguilar no cortaban ni una y en la defensa Peña estaba fatal. Y por arriba Portillo era un alma en pena, Valdez no estaba, Rufete tiene que salir cuando queden 5 minutos para perder tiempo y vayamos ganado y Thomert, pues que vamos a decir si no ha jugado ningún partido y hoy sale de titular. Después del minuto 25, más o menos, hemos mejorado, se ha controlado el balón y el centro del campo. Ha empezado a aparecer Aguilar que ha buscado más controlar la velocidad del partido para el Hércules y aunque sin apretar demasiado hemos generado una ocasión y ahí estaba el goleador para meterla.

El segundo tiempo ha sido más de lo mismo y con más posibilidades para abrir el campo y darle balones a Portillo y Valdez, pero Aguilar es muy lento para sacar las contras y Tiago se acelera demasiado. Thomert, me ha dado la impresión de que le falta compenetración con el resto. Y con el partido como estaba el entrenador del Hércules tenía dos opciones: sacar a Fritzler y quitar al francés o a Rufete para dar tranquilidad en el centro y frenar el ímpetu del Almería o bien sacar a Kiko y darle más velocidad al ataque para matar el partido a la contra. Ni una ni otra, saca a Sendoa, otro dinosaurio de la liga para terminar de rompernos.

Podía haber pasado cualquier cosa y todas estas idas y venidas podían habernos dado los tres puntos ante un rival desvencijado y sin rumbo, pero pensando que hemos perdido dos puntos, al final hay que dar gracias de haber sumado.

Larga vida al fútbol.

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