Tenemos una organización desorganizada. Solo basta con comparar a nuestro equipo con otros que han estado o eran incluso menos que el nuestro hace no más de 20 años. En ese tiempo e incluso en menos esos equipos han crecido como club consiguiendo metas deportivas que entonces nadie se podría imaginar y que a nivel institucional han conseguido estar a la altura de los mejores clubes de España y en algún caso de Europa.
Vamos a tomar de muestra un equipo que hasta hace aproximadamente 10 años no sabía nadie de su existencia, porque para eso tienes que andar por la segunda división cuando menos. Este equipo es el Villarreal, en este espacio de tiempo han creado un club saneado económicamente, con unas instalaciones inmejorables y con un trato al abonado que merece la pena estudiarlo. Tienen una cantera que ya ha conseguido meter a su filial en la segunda división de nuestro fútbol. No voy a decir que no tengan sus puntos negros que los habrá, pero mirando al nuestro, es un paraíso.
En ese tiempo nosotros seguimos sin sanear al club, cada vez pagando más por menos, es decir, ahora hasta hay que pagar para hacerse una foto con los jugadores que hasta hace unos meses podías saltar la valla y hacerte una foto con ellos, y no lo digo por mí, sino por los chavales que ven en ellos un espejo en el que mirarse. Debería de ser al contrario y más en un club modesto como el nuestro. Así nos va, sin cantera, sin un proyecto de futuro para lo que venga después de este año, en definitiva sin nada. Da pena pensar que no hay un proyecto de ciudad deportiva o de residencia para formar a chavales, claro que esto que digo da risa, solo hay que ver al primer equipo donde entrena.
Otra muestra es el Deportivo de la Coruña que en año 88 estaba a punto de desaparecer y emergió hasta ser lo que hoy es, en este caso no cabe ensalzar el buen hacer sobre la cantera, que no se prodiga mucho, pero si en mantener al equipo en la elite y que los aficionados disfruten de buenos precios y descuentos para ir al estadio cada domingo.
En muchos campos de España existen gradas para los jóvenes a precios asequibles y si queremos que esto continúe deberíamos de darle más cancha a los más jóvenes para que puedan ir al fútbol como yo iba con mi padre. Ese anuncio de la tele es un reflejo de lo que vivimos, ahora yo a mi padre no lo llevo al fútbol, lo vemos en la tele, pero no porque sea mejor, sino porque no podemos permitírnoslo.
Larga vida al fútbol.
Vamos a tomar de muestra un equipo que hasta hace aproximadamente 10 años no sabía nadie de su existencia, porque para eso tienes que andar por la segunda división cuando menos. Este equipo es el Villarreal, en este espacio de tiempo han creado un club saneado económicamente, con unas instalaciones inmejorables y con un trato al abonado que merece la pena estudiarlo. Tienen una cantera que ya ha conseguido meter a su filial en la segunda división de nuestro fútbol. No voy a decir que no tengan sus puntos negros que los habrá, pero mirando al nuestro, es un paraíso.
En ese tiempo nosotros seguimos sin sanear al club, cada vez pagando más por menos, es decir, ahora hasta hay que pagar para hacerse una foto con los jugadores que hasta hace unos meses podías saltar la valla y hacerte una foto con ellos, y no lo digo por mí, sino por los chavales que ven en ellos un espejo en el que mirarse. Debería de ser al contrario y más en un club modesto como el nuestro. Así nos va, sin cantera, sin un proyecto de futuro para lo que venga después de este año, en definitiva sin nada. Da pena pensar que no hay un proyecto de ciudad deportiva o de residencia para formar a chavales, claro que esto que digo da risa, solo hay que ver al primer equipo donde entrena.
Otra muestra es el Deportivo de la Coruña que en año 88 estaba a punto de desaparecer y emergió hasta ser lo que hoy es, en este caso no cabe ensalzar el buen hacer sobre la cantera, que no se prodiga mucho, pero si en mantener al equipo en la elite y que los aficionados disfruten de buenos precios y descuentos para ir al estadio cada domingo.
En muchos campos de España existen gradas para los jóvenes a precios asequibles y si queremos que esto continúe deberíamos de darle más cancha a los más jóvenes para que puedan ir al fútbol como yo iba con mi padre. Ese anuncio de la tele es un reflejo de lo que vivimos, ahora yo a mi padre no lo llevo al fútbol, lo vemos en la tele, pero no porque sea mejor, sino porque no podemos permitírnoslo.
Larga vida al fútbol.
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